dimecres, 30 d’abril del 2008

Icárida

El vuelo es alto y en ocasiones
hay que pararlo
por el cansancio.

Duelen las alas. Duele el pasado.
El dolor vuelve.
Duele despacio.

Lo sé.
Excesivo peso
en el centro del pecho
que tira hacia adentro,
y anhelo en exceso
e incienso que quema
pasados perversos.
Sé que duele.

Duele aunque vuele.

Pero tú.
Ahí.
Sigues viva.

Y el mundo cambia y cambian tus pasos.
Eres camino,
eres partida,

eres timón
y remo
y vela.

Por eso sigue
sin más problemas
que el respirar.

Camina y parte,
rema y afrenta.
Sé como quieras,
vuela aunque duela
el tropezar.

Tú eres tu fuerza.

Vuela aunque duela.
Vuela aunque duela.
Vuela aunque duela.

3 comentaris:

Anònim ha dit...

preciós.vuela aunque duela, claro que sí.

Paula del Caos Universal ha dit...

Gracias por el comentario, pero creo que por este rincón también hace falta una sonrisita...
Que no duela tanto, saludos!

anaisnit ha dit...

Vuela. El dolor te hará más ligera. Vuela. El dolor todo lo cura. Bello poema.Un saludo y gracias por tu comentario.